Newman: El buen sentido no es la conciencia, los buenos modos no son la humildad, ni la amplitud y acierto de las ideas equivalen a la fe.

 El buen sentido no es la conciencia, los buenos modos no son la humildad, ni la amplitud y acierto de las ideas equivalen a la fe. La filosofía, por ilustrada y profunda que sea, no proporciona dominio sobre las pasiones, ni motivos influyentes, ni principios vivificadores. La educación liberal no hace al cristiano ni al católico, sino al caballero. Es bueno ser un caballero, como es bueno también poseer un intelecto cultivado, un gusto exquisito, una mente sencilla, equilibrada y desapasionada, y un comportamiento noble y cortés en los asuntos de la vida. Son, todas ellas, cualidades de un saber hondo, son el fin de una Universidad (…). Pero, repito, no constituyen garantía de santidad ni de recta conciencia, y pueden asociarse a gente mundana, libertina, sin corazón, que, envuelta en esas cualidades, puede resultar agradable y atractiva (Newman, 2011, p. 140).

Newman, J. (2011b). Discursos sobre el fin y la naturaleza de la educación universitaria. Pamplona: EUNSA.




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